Bueno, ¡ya ha llegado el momento finalmente! Este es el primer post de Nina Laluna, que como cada estreno que se respete viene cargado de una buena dosis de nervios y también – ¿para qué negarlo? – de miedo a la página blanca, el horror vacui que amenaza a todo creativo.
Decidir escribir un blog es seguramente una inversión muy importante: de tiempo y de pasión. Al fin y al cabo es exponer tu intimidad al mundo caótico del web.
Pero como se dice:
quien no arrisca, no aprisca
Así que he decidido regalarme un blog (bueno tenía que ser para mi cumple, pero he tardado un poco en manejar todo esto) y de…tirarme al agua 🙂
Sentía la necesidad de involucrarme en algo creativo y estimulante, sobre todo de encontrar un espacio en el que expresarme líbremente: como decía Virginia Woolf
para empezar, tener una habitación propia…
y hoy en día, el web te da esta posibilidad.
Aunque en mi opinión el espacio físico también tiene su importancia: voy a ser sincera, hasta que no organicé mi rinconcito en casa, la idea de blog se quedó en las nubes. Mi nuevo escritorio y espacio de trabajo me ayudaron a ponerme manos a la obra.
¿Por qué escribir un blog? |
Bueno, esta es una pregunta difícil, cada uno seguramente tendrá sus razones: mejorarse profesionalmente, ampliar la red de contactos, practicar en la escritura y en la comunicación, etc, etc…..
Pero quiero darte mi punto de vista, me parece la mejor manera de presentarme.
Si hay algo que he aprendido este último año es el poder de la motivación. Sin motivación me quedo literalmente sin fuerzas, todo pierde su sabor, me siento como con gripe. Es una forma de depresión muy sutil porque aparentemente no tiene razones de ser… y puede llevar a un círculo sin salida : cuanto más no le encuentres el sentido, más te deprimes.
El blog para mí es esto, una aventura nueva que me motiva y me estimula a aprender. También puede dar miedo, quizás suene un poco excesivo, pero como soy una persona bastante reservada para mi es así – ¡seguramente alguien se reconozca en esto! Y va a sonar aún más raro, pero esta fue una motivación importante: me he dado cuenta de la cantidad de cosas a las que he renunciado por miedo o más bien inseguridad, por eso me he decidido a empezar el año saliendo de mi zona de confort y dar batalla a mis fantasmas.
Y como al fin y al cabo es tu proyecto, vaya como vaya la cantidad de estímulos y perspectivas diferentes que te aporta es lo que más vale. Como decía antes, encontrar algo que te motive a crecer, aprender y ser más curiosa es ya en si el principal objetivo.
La verdad es que siempre tuve el gusanillo de escribir un blog, simplemente porque escribir es lo que hago normalmente (es más, mi madre también lleva uno hace tiempo y esto de estar tecnológicamente más atrasada que mi madre no me parecía muy bien 🙂 ).
Pero me decidí realmente cuando me tropecé con la página de Hello!Creatividad – donde las superwomen Bea, de Con botas de agua, junto a Mar y María, de Sonambulistas, organizan una serie de cursos en tema creativo- y me dio por hacer el de Hello!Blogging, que la verdad que de blogs no tenia mucha idea. Y si ahora estoy aquí es también porque el curso me ha encantado, con unas profes tan majas y profesionales era un placer estudiar: al terminar cada lectura te picaban las manos y te entraban las ganas de ponerte a trabajar YA.
Cada noche me leía las clases antes de acostarme y por la mañana me despertaba con muchas ganas de practicar, experimentar y aprender.
También me inspiró leer las cinco razones para escribir un blog de las que habla Mar en Sonambulistas: el punto de vista de una persona que lleva tiempo en esto es sin duda iluminante, y como yo estoy dando mis primeros pasitos por ahora me quedo con esta frase:
¡Así que abramos ventanas y a empezar esta nueva aventura!